miércoles, 12 de octubre de 2005

Las deprimentes crónicas de un deprimido deprimente

El título se me ocurrió mientras charlaba por messenger con Javi, me ha gustado y creo que debería llamar así al blog, pero no sé si se le puede cambiar el nombre .

Bueno, desde el domingo tengo esto abandonado, y la verdad que he hecho tantas cosas que apenas he parado por casa, el Lunes fuí a la entrevista con la gente de Opencor, creo que fue bien, me decían algo pronto (cruzemos los dedos) sería para un puesto de gestión, o de supervisión (si hay suerte) y en las oficinas centrales si consideran que encajo más allí. Fuí con mi traje gris oscuro, camisa blanca y corbata granate, (vamos que me volvía ver mu guapo, despues de la semana pasada, aunque contribuyó a que me lo dijera Valen en nuestro breve rato juntos en el aeropuerto, te quiero nene) y cuando terminé me pasé por Elektra, la tienda de comics de la calle San Bernardo a mirar novedades. De ahí me puse a mirar cosas para regalarle a Mónica ya que el martes habíamos quedado a comer para celebrar su cumple, y claro soy el que tengo el tiempo y también, tengo que decirlo, el gusto como para hacer un regalo chulo.

Me pasé hasta las dos de la tarde mirando de un lado para otro, todo me gusta, Roberto dice que soy como una urraca me gusta todo lo que brilla, pero es increíble la cantidad de cosas que se me ocurrieron para regalarle, desde una pulsera de cristales de Swarovski de morirse al DVD de Batuka para que bajara unos kilitos... Lo dejé para volver por la tarde y pasar por casa a comer, que la economía no está como par ahacer excesos. Por la tarde y despues de haber trasteado con el DVD recorder para ver si podía hacer grabaciones de DVD's originales y comprobar que no es posible de forma directa, me bajé al centro comercial de mi barrio, Parquesur, a finiquitar lo del regalo, y fue cuando me dí cuenta que casi todas las cosas que miraba tenían en común el color rosa, que es el preferido de Mónica, así que se me encendió la bombilla y pensé que lo mejor era un regalo en plan coña y luego el regalo, regalo, asi que para la coña busque cosas rosas y de ahí pensé que como la llamamos fresita, todo lo que fuese con ese tema pegaría y vaya como funciona, en seguida encontré un exfoliante corporal con olor a fresa, bombas de baño con olor a fresas, champú Herbal Essencies con olor a fresas, una vela con olor a fresa, al que añadí un guante exfoliador, esponja, cepillo, una redecilla de abuela para el pelo, rulos, masajeador todo de los chinos pero rosa, completé el regalo con gominolas rosas, massMalows (nubesdetodalavida) fresas y besitos rosas y como colofon una caja de preservativos con sabor a fresa!

Con mi gen gay, el que nos capacita para hacer cualquier cosa relacionada con arreglos, flores y empaquetado con habilidad inusitada, preparé la caja con mucho mimo, vamos que tardé toda la tarde en conseguir todo lo que necesitaba y dos horas en casa preparandolo. Puse papel seda de color rosa en el fondo de la caja, coloqué los regalitos, cubrí con las gominolas, mas papel seda, la tapa y lo envolví en un perfecto papel rosa, coronando con un inmenso lazo rosa.
Como regalo se´rio finalmente me decidí por un par de entradas para un musical, en primer lugar habiamso pensado Hoy No Me Puedo Levantar, pero no tenían entradas hasta Diciembre, si quería para viernes o sábado, así que cambiamos a Mamma Mía! pero El Corte Ingles ya no vende entradas para ese musical, así que lo dejé para la mána del Martes.

El Martes y una vez recogidas las entradas para Mamma Mía!, fuí al trabajo de Mónica y que había sido por muchos años el mío, saludé a todo el mundo, y todo seguía más o menos como lo recordaba, en cuanto llegaron el resto nos fuimos al restaurante que está en la calle Sandoval, un asador anteriomente conocido como Basarri que ahora no se como s ellama pero todo sigue igual ¿?. No cantamos cumpleaños felíz, porque da mala suerte antes del cumple, así que le entregamos los regalos tomamos café y como fuimos tan majos, nos invitaron a licores y una botellita de cava.

Uno que por fin estaba contento y que me lo había pasado tan bien, tanto el lunes (y eso que estube solo todo el dia) como el martes en la comida, me quedé con todos los que no volvieron a trabajar, que para algo era vispera de festivo. Querían ir a la peluquería y ver alguna cosilla, así que mientras alguno terminaba algo pendiente primero nos fuimos a tomar un café y despues a la pelu, y lo más increible es que Roberto se decidió a raparse la cabeza!, bueno le empujamos todo un poco, Flavia la que más, y yo que llevaba el GQ Style con Bradd "quepeasodecuerpo" Pitt en la portada con la cabeza rapada hizo el resto.

Terminada la sesión de peluquería, como me reí con el rapado, le dije a la peluquera que es conocida, que se lo hiciera de espaldas al espejo y que empezase por la parte de arriba, para que no hubiese oportunidad de arrepentimiento, cuando terminó y se giró gritó un NO ME GUSTA que escucho toda la peluquería, me moría de risa. Pues nos fuimos a dar un paseo, mirar tiendas y acabamos tomando unas cañas y gambas en la casa del abuelo. Como están esas gamabas!

Estando ahí llamó Martín, un argentino que es encargado de otra tienda que decía que nos fuesemos por la noche con él a Joy Slava, Adriana dijó que si íbamos todos si que iba, y de ahí llamaron al resto. Volví a casa sin saber que iba a hacer, porque por un lado ni conozco mucho a Martín, y por otro tampoco salgo a menudo con el resto de gente con la que comí, y además tenía a Valen esperando para ver cuando podíamos charlar por el messenger, que fué lo primero que hize al llegar a casa, contárselo y hablar con él, pero ya era tarde y le cerrabn el ciber, así que me dijo que fuese, me arreglé, cené algo rápido con mi madre mientras vimos House (serie de la Fox) y me fuí rumbo a Madrid, habiamos quedado en casa de Adri, a tomar la primera allí, y claro como es venozolana tenía el mejor Ron que he probado, Aniversario, y así estuvimos hasta que nos fuimos pa la Joy.

Al principio ni me gustó demasiado el sitio (increíble pero no lo conocía) ni la gente y las copas carísimas (13 euros) , pero he prometido que no iba a hacer excesos asi que apenas bebí. Ví muchos famosillos casposos, Marlene Morreau, Marc Ostarcevic, Marta Torné y el portero de aquí no hay quien viva. Roberto se pasó toda la noche mirando y tirando los trastos a Martín y yo emepecé a pasarmelo mejor, tanto que nso quedamos hasta las 6!, al salir diluvio sobre Madrid, y un hambre voraz, parada de repostaje con pizza, wrapps y sandwiches. Vuelta a casa y sin apenas dormir 4 horas me he levantado como nuevo.

Vaya rollo he soltado, pero una vez he empezado ya no hay manera, así que felicidades si has leido todo, ahora espero poder charlar con valen por el messenger porque le extraño mucho, será la lluvía que me pone meláncolico aunque me parece que no me cuesta ponerme así,

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