Hola, estoy cabreado, por mi, por ti porque todo sea una mierda, te odio, te quiero, no sabía que pudiese haber tan poca distancia entre ambos sentimientos.
Ya se que habíamos hablado del tema, que no puede ser, que tu estás en otro punto, pero no se, no puedo evitarlo, quizás es lo que tu dices, que es una obsesión, ojalá te pudiera sacar de mi cabeza, quiero que esto se acabe, dejar de pensar en ti, dejar de esperar lo que no llega, dejar de mirar el móvil por si te has acordado de mi, no se, es como esa peli que nunca llegué a ver, la de Jim Carrey y Kate Winslet, Olvidate de mi!, que aunque no la he visto se que la chica como no puede olvidarse de la persona que ha sido mas importante para ella, recurre a un científico que le borra todos los recuerdos suyos con el. Eso quiero hacer yo, me duele todo, me hace daño todo, que salgas, que te quedes, que vayas o que vuelvas, verte o no verte. Todo me hace daño porque de todas las maneras no te tengo, no como yo quiero, no como siempre hemos querido los dos, antes tú, ahora yo.
Hace un par de semanas mi hermano Alfonso me lo dijo, tened cuidado no vayáis a joder una amistad de tanto tiempo y al final qué? lo hemos conseguido? o podemos hacernos más daño? Yo no puedo seguir Rober, de verdad, quiero dejarlo, no me veo con fuerzas para verte más como tampoco las tengo para no verte, pero por lo menos se que no viéndote me olvidaré de ti. Goyo dice que da igual lo que diga, que voy a volver, que quedaremos y que otra vez al principio... Lo será? yo soy débil lo sabes, pensaste que era fuerte y quizás por ver que no lo soy dejaste de quererme, viste que tu héroe tiene los pies de barro como todo el mundo.
Quizás necesite de ti que te apartes un poco si yo no lo consigo hacer, ayúdame, de verdad, si realmente te importo como amigo ayúdame a dejar de quererte, ayúdame a olvidar que solo quiero estar contigo. Ayúdame, siento que me ahogo. Y no puedo más, no puedo estar pendiente de lo que dices, de lo que no, de lo que haces y de lo que dejas de hacer. Es irracional, lo se, yo también lo viví contigo, pero tu te estás luciendo, no me haces bien, se que no es aposta pero me lo pones difícil, me dejas un mensaje diciéndome que estás cansado que no vas a salir, y de veras, no me importa que lo hagas, pero de saberlo seguro que yo no me hubiese sentido como un gilipollas al llamarte y saber que estás en su casa así de sopetón, de repente.
Soy tonto, anoche quería enfadarte, cuando hablamos desde mi trabajo, te dije que habías tomado una decisión, y que salías con el, y solo me lo decías para que saliera con vosotros, quizás sea semántica pero tu me lo vendes como que quieres salir conmigo y creo yo que son cosas diferentes. Todo esto cuando en realidad quería que hubieses aparecido a recojerme, a tomarte una copa con mis compañeros, a divertirnos juntos, a querer estar conmigo, a querer quererme otra vez.
Y en vez de eso, ¿qué he conseguido? que pases mas de mi, que aunque no te contestase a ese mensaje tampoco te importase, esta mañana al encender el móvil solo esperaba ver uno tuyo que dijera yo que se, algo, incluso que al final sí habías salido, supongo que quería saber que te habías acordado de mi, pero no, no lo hiciste, en cambio no le doy importancia a los que si han entrado, uno de Goyo, otro de Vini, François y hoy María, Eva y Antonio, Claudia..., por estar solo pendiente de ti me pierdo a toda la gente que quiere estar conmigo, y no puede ser, esto tiene que acabar.
Al final después de la bronca, no he podido evitar volver, soy como un perrillo que vuelve a su amo aunque este le pegue, hemos vuelto a hablar y nada supongo que crees que todo está arreglado que podemos ser amigos otra vez, no sabes cuanto lo deseo yo, pero ojalá pudiera hacerlo chasqueando los dedos.
Supongo que quedándome encerrado y revolcándome en mi miseria no gano nada, pero es mi manera de pasar por esto, te lo he dicho antes, quizás necesite que me digas algo traumático y feo para que yo asimile que no puede ser, pero eso lo hago yo también por ti y ahora imagino que necesito pasarlo mal, volver a llorar, para que las lágrimas borren este sentimiento, que dicen es el más bonito pero a mi de momento solo me ha traído dolor.
¿Sabes qué es gracioso? recuerdo que cuando empecé a escribir este blog, allá cuando el niño francés se marchó y te lo imprimí y te lo leíste, noté que sentías celos, querías ser el protagonista de esta historia y ahora que lo eres o lo has sido, (no se muy bien en que tiempo verbal conjugarte), no has querido leerlo, lo has evitado, no me has pedido la dirección o no las has guardado cuando te le he mandado, de hecho nunca sabré si estas lineas que son para ti, las leerás tú alguna vez.
Quiero decirte adiós, Roberto, quiero pasar página, avanzar, olvidarte y y olvidar estos meses, cuando lo haga quizás pueda volver a verte.
Te quiero.